Soy Alejandra Artiel, fliscornista, trompetista, pianista y compositora, principalmente. Nací en Ceuta, crecí en Cádiz y, desde muy pequeña, la música ha sido una parte esencial de mi vida. Empecé estudiando piano clásico a los 8 años, pero siempre me fascinó el jazz y la trompeta —especialmente la música de Clifford Brown—, lo que más adelante me llevó a iniciar mi camino como trompetista.
La música siempre estuvo presente en casa: mi padre, aficionado a la guitarra flamenca, y mi madre, melómana empedernida de la música negra, crearon un entorno donde era casi imposible no enamorarse de la música. Así nació también mi pasión por las Big Bands, con referentes como Thad Jones o Maria Schneider, pero también influencias de otros mundos como Bon Iver o Björk. Esta inquietud me ha llevado a seguir formándome con músicos como Ed Partyka y a escribir música regularmente para la Andalucía Big Band, de la que formo parte desde 2013.
También he tenido la suerte de explorar la composición para cine, creando bandas sonoras para cortos como Recordar y Vidas por escribir, entre otros proyectos.
La música, para mí, es una necesidad vital, un viaje constante… y aquí comparto contigo un pedacito de ese camino.